El sueño que parecía distante y mantuvo a la expectativa a muchos hinchas de una de las camisetas más gloriosas del fútbol uruguayo es ahora una realidad que se va materializando conforme pasan los meses y las obras de construcción encabezadas por el ingeniero Néstor Sclavi avanzan de forma sostenida.
Se pone el casco
El actual presidente del club aurinegro Juan Pedro Damiani se vistió con el uniforme elemental de los operarios de construcción consistente en un chaleco naranja y un casco amarillo, como forma de simbolizar el trabajo y el progreso de las obras y, emplazado en las arenas del futuro complejo deportivo, mantuvo conversaciones con Tenfield sobre diversidad de temas, entre estos, las cercanas elecciones presidenciales dentro del plantel “carbonero” y su posible candidatura.
El ejecutivo reconoció la importancia de los hinchas en la realización del sueño de la Ruta 102, entre Camino Mangangá y Camino de los Siete Cerros, en Montevideo, proyecto financiado principalmente por el empresario Francisco Paco Casal, pero tomando impulso desde el apoyo masivo que recibe de la población más adepta al cuadro mirasol.
Uno de los mejores de Sudamérica
Mientras el imponente coloso va tomando forma, los directivos y los arquitectos aseguran que se trata de uno de los mejores y más modernos estadios que se pueden ver en la región, o como podría decirse en palabras del arquitecto Luis Rodríguez Tollado “será una obra única en América”.
Aun habrá que esperar algún tiempo más para poder apreciar los resultados de este aunado esfuerzo de ingeniería, pero sin lugar a dudas este monumento deportivo ya va cristalizando con el imparable accionar de las máquinas Saceem. Los trabajos de excavación, traslados de tierra y la colocación de pilotes de 12 metros ya han concluido, de acuerdo a lo expresado por el ingeniero Sclavi quién además afirma que ahora el enfoque está orientado a la verticalidad de la estructura o en otras palabras la construcción “hacia arriba”.